LANSING.- Una investigación de un equipo de investigadores de la Universidad de Michigan, determinó que el queso produce en el cerebro de quién lo consume una respuesta similar a la heroína.

Todo esto tiene una explicación científica. Por un lado, la heroína es capaz de elevar los niveles de dopamina en tu cerebro hasta el 200%. Es decir, una sensación adictiva de placer elevado al infinito y más allá. Del mismo modo, los alimentos considerados altamente sabrosos, como el queso, producen un efecto parecido, aunque la reacción a la sustancia es diferente.

Esto se debe a que el queso tiene una proteína que se llama caseína que es la encargada de producir ese efecto similar al de las drogas. Esta proteína está presente en todos los productos lácteos, pero es en el queso donde su valor se multiplica por diez, ya que se trata de un producto más elaborado que los otros. Por tanto, la caseína es la encargada de liberar casomorfinas en el cuerpo humano, lo que genera una agradable sensación de bienestar y provoca adicción.

Sin embargo, lo que no pudieron demostrar en la investigación era el alcance que tenía la casomorfina en el cerebro humano, es decir, lo que es capaz de producir realmente en las personas. Lo que está claro que es la culpable de que no podamos dejar de comer queso y siempre queramos más y más.