El reciente incremento de afluencia turística, en buena parte debido al arribo masivo de sargazo a las playas, podría ocasionar un desastre ambiental

AGENCIAS

MÉRIDA.- El fenómeno del sargazo que ha afectado en los últimos años la actividad turística de Quintana Roo ha hecho crecer la afluencia de visitantes a los cenotes de la Península de Yucatán, lo cual podría provocar un desastre ambiental.

Sin embargo, aunque parecen buenas noticias en el tema económico y turístico, hay preocupación entre grupos ambientalistas y especialistas en el rescate de cenotes por el impacto que este crecimiento en la afluencia puede tener para la biodiversidad que habita en su interior y en los alrededores de esos ríos subterráneos.

“Sin duda los hoteleros y empresarios en Quintana Roo están dando un vuelco y mirando tierra adentro debido al grave problema del sargazo. Esto se puede convertir en un nuevo problema, ya que si explotan de manera irresponsable los cenotes, como ha sucedido en muchos casos, se puede causar un desastre ambiental”, declaró el arqueólogo subacuático Sergio Grosjean Abimerih.

El especialista, quien a lo largo de su carrera ha rescatado junto con su equipo de expedicionarios más de 80 cenotes, explicó que cada uno es un ecosistema único y que en algunos han encontrado especies de flora y fauna que sólo viven y se sustentan en esos ojos de agua.

“Hay muchas especies endémicas que podrían estar amenazadas por la contaminación e impacto producido por las oleadas de turistas a ciertos cenotes. Ya muchas especies nativas han desaparecido ya que la gente, al ingresar con repelentes, bloqueadores, bronceadores y cremas, dañan la calidad del agua

Además, continuó, mucha de la gente que ingresa a estos frágiles ecosistemas realiza sus necesidades fisiológicas dentro del cuerpo de agua, lo que también genera contaminación.