El presidente de la Canirac Cancún considera el Pacic anunciado por la 4T un “remedio casero” que no dará solución a la carestía; el sector empresarial, cansado de las promesas incumplidas de los candidatos

SALVADOR CANTO

“El Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic) acordado entre empresas privadas y gobierno para no afectar 24 productos de la canasta básica, nos va generar muchos altibajos porque más que una medida real para atender el problema que existe, es un remedio casero que ayudará a lo mejor tres o cuatro meses a mantener esa estabilidad, pero de ahí no sabemos que vaya a pasar porque eso no es la solución”, afirmó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), delegación Cancún, Julio Villarreal Zapata.

En entrevista con El Despertador de Quintana Roo, el recién electo líder de los restauranteros en el Caribe Mexicano destacó que mientras no se resuelva el tema del precio de la gasolina y que los más de 600 mil millones de pesos que se destinan del erario para su subsidio de manera exponencial, cualquier plan o programa que se busque para acortar la inflación no servirá de mucho.

De hecho, expuso que en la lista de productos hay algunos como el limón, el jitomate y aguacate que aunque no les aumenten de precio, el costo real en estos momentos está por arriba del 7.80% que anunciaron.

De Viva Voz subrayó que el alto costo de estos productos no se debe a la guerra entre Ucrania y Rusia ni la pandemia, sino al hecho de que están secuestrando camiones de limones, están secuestrando a los aguacateros, hay problemas con los jitomateros, o sea, “el crimen organizado le está pegando muy duro al productor”.

Recordó que el sector restaurantero de Cancún viene padeciendo el incremento de precios desde hace varios meses, lo que ha obligado a muchos agremiados a tener que reajustar el costo de los alimentos.

En cuanto al tema electoral, Villarreal Zapata platicó que en las reuniones que han tenido con los candidatos, tanto a la gubernatura como a las diputaciones el sector empresarial ha expresado claramente que ya está cansado de que acudan a las convocatorias para escuchar sus propuestas, pero una vez que llegan a la silla gubernamental o a los curules se les olvida todo lo platicado “y eso es algo que hemos vivido infinidad de veces”.

“Tenemos devastación forestal, tenemos la inseguridad gigantesca, entonces hemos trabajado de la mano con las autoridades; sin embargo creo que no hemos podido llegar a lo que queremos y esperamos que con las próximas administraciones esto pueda cambiar”, exhortó.

Finalmente, habló de los planes a corto y mediano plazo para la industria gastronómica en el Caribe Mexicano, sobre los cuales consideró que existen buenas expectativas para el cierre del año.

—¿Qué opina del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic) que presentó el gobierno federal?

—Con este convenio que se hizo entre empresas privadas y gobierno de no afectar 24 productos de la canasta básica, sobre todo para tratar de frenar la inflación, yo creo que vamos a tener altibajos porque es una “gran curita” para una medida que nos podrá durar tres o cuatro mesecitos porque al final del día tenemos el gran problema al subsidio que se está dando a las gasolinas y a la energía eléctrica y ahí hay un gran hueco de 600 mil millones de pesos que puede llegar a afectarnos en virtud de que estos subsidios se hacen con dinero del gobierno; entonces, este plan que se presentó para tratar de controlar la inflación yo siento que no es la solución real, es un remedio casero y a lo mejor nos ayuda unos meses más o menos a mantener esa estabilidad y esperemos que para ese entonces podamos encontrar en conjunto con las autoridades, sociedad civil y empresarios la fórmula para que la inflación se controle y bajen un poquito los precios.

—¿Considera que solo se trata de un paquete de buenas intenciones, considerando que no hay un plan maestro ni logístico para que eso funcione?

—Es correcto; de hecho, analizando un poco la propuesta que hicieron los empresarios, digo, los macro empresarios, porque estamos hablando de grandes fábricas y de grandes productores, contemplan 24 productos de 40 de los que consta la canasta básica; sin embargo y aunque no los aumenten el día de hoy, el limón, el aguacate, el jitomate que son insumos del primer orden, todos están en precios por arriba del 7.80% que anunciaron.

—¿Cuál cree que sea el problema real del encarecimiento de algunos productos?

—Te pongo un ejemplo con el limón: el problema no es la guerra entre Ucrania y Rusia, el problema no es la pandemia, el problema es que están secuestrando camiones de limones, secuestrando a los aguacateros, hay problemas con los jitomateros, o sea, le están pegando muy duro al productor. Entonces, al momento de que le pega el crimen organizado a estos productores, pues ¿qué pasa?, que sea la ley de la oferta y la demanda, hay mucha demanda y poca oferta y obviamente los precios crecen, y obviamente la afectación que tienen los combustibles no hay manera de que los productores se la quiten de encima y eso, aunado a que aunque quitaron algunos aranceles para poder importar algunos granos o algunas cosas básicas, seguimos con el tema de que el transporte de todas las logísticas de importación están súper lentas, tenemos escasez de muchas cosas porque alguna grandes navieras y grandes transportadoras de alimentos cerraron, algunas otras se quedaron con muy pocos empleados y por eso hay un gran problema de desabasto.

—¿Piensa que de no haber una solución inmediata la inflación pueda rebasar el 10%?

—Por ahí se hablaba de un 10 o 12 por ciento, lo cual sería catastrófico; acuérdate que la inflación es conocida en el argot financiero como “el impuesto a los más pobres”, entonces considero, en primer lugar, que sería devastador para la población que menos tiene; y dos, el gobierno debe tomar medidas económicas diferentes, tiene que cambiar el rumbo porque el ahuyentar la inversión, el no generar condiciones para traer más inversiones y más negocios, eso tiene a la economía detenida; es decir, los generadores de empleos somos los empresarios, todos los que tenemos un negocio, entonces la única manera de que podamos detener esto es que den facilidades y las oportunidades de crear más y más negocios. Además tienen que hacer más caro el dinero, es decir, subir las tasas de referencia porque al final del día eso es lo que está causando también que la inflación siga subiendo; probablemente a finales de este mes puede que suba un 1.5% más la TIIE (la Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio, determinada por el Banco de México) y eso hace que el dinero sea más caro, obviamente los préstamos hipotecarios, los préstamos bancarios, los préstamos a Pyme (Pequeñas y Medianas Empresas) van subiendo porque la tasa de referencia sube, entonces yo creo que aquí el gobierno tiene que tener mucha prudencia en el trabajo de la economía porque podríamos caer en una depresión, lo cual afortunadamente hasta ahora no hemos hecho, pero sí podría llegar el momento en el que tendría una crisis financiera bastante grave. Anunció por ahí la Secretaría de Hacienda un crecimiento de este año del 2.5%; yo, la verdad, creo que si llegamos al 1.5% del crecimiento económico sería una maravilla, pero si se compara ese porcentaje con los 14 puntos que caímos más o menos en el 2020 y con el crecimiento que fue casi nada en 2021 y se compara además con la inflación, la realidad es que seguimos en una situación económica bastante severa.

—Ustedes como restauranteros han padecido el encarecimiento de muchos productos, lo que los ha obligado en algunos casos a tener que ajustar el costo de los platillos, ¿eso qué tan difícil ha sido?

—Desafortunadamente varía mucho porque depende de qué tipo de restaurante seas, por ejemplo si eres un restaurante que se dedica única y exclusivamente como un Steak House que vende carnes, déjame decirte que la carne importada está por los cielos y estamos hablando que ha tenido incrementos de un 20 o 25 por ciento y por esa razón es muy imposible para el restaurantero soportar este tipo de alzas sin tocar los precios. A lo mejor pueden mantener el margen de utilidad y decir que lo castiga un poco tratando de no afectar al consumidor porque entre más le suban a los precios el consumidor dejaría de ir. En ese orden de ideas, creo que muchos restauranteros hemos tratado de mantener y a lo mejor si nuestro costo estaba en el 32 o 32 por ciento, pues a veces sacrificamos que se nos vaya hasta el 38 por ciento con tal de no afectar el precio al público, pero sin embargo, si la tendencia sigue como está, pues desgraciadamente volveremos al punto de partida, desgraciadamente el precio lo pagamos todos los consumidores porque así como nosotros somos restauranteros, también somos consumidores de restaurantes y al final nos toca pagar a los consumidores los platos rotos.

—Dentro del ámbito electoral, como empresarios, ¿qué sensación les han dejado las reuniones con los candidatos a la gubernatura y diputaciones?

—Nosotros hemos sido muy enfáticos con ellos en que estamos cansados de que nos visiten y que sí lleguen a las convocatorias para escuchar sus propuestas, pero una vez que llegan a la “silla”, o los curules, se les olvida todo lo que hayamos platicado en estas sesiones. Los estamos invitando y exhortando a que cuando lleguen a esa silla o a esa curul, que no se les olvide que al final del día los empresarios y los restauranteros somos los que generamos los empleos y somos los que los pusimos ahí para que representaran al pueblo. Yo he sido muy enfático con ellos en que tenemos que trabajar coordinadamente entre sociedad civil, empresariado y gobierno para poder sacar a Cancún y a todo Quintana Roo de esta situación en la que se encuentra. Tenemos devastación forestal, tenemos la inseguridad gigantesca, entonces hemos trabajado de la mano con las autoridades; sin embargo creo que no hemos podido llegar a lo que queremos y eso solo se logra trabajando en equipo, en conjunto, no solo es el gobierno quien tiene que hacer las cosas, también la sociedad civil, también el empresariado y en conjunto con las autoridades, es la única manera en la que podemos salir adelante y eso es lo que hemos expuesto a todos los candidatos, que no se olviden porque nos ha pasado no una, sino cien veces, que al final cuando ya llegan al poder y ya están ahí, no acuden a las convocatorias, a las mesas de trabajo, no se logran los acuerdos que se tienen que lograr y entonces empieza otra vez el empuje entre el empresario y el gobierno que no debería de ser así, que debería de trabajar en forma paralela.

—¿Cuáles son los planes a corto y a mediano plazo para la Canirac?

—A corto plazo lo que necesitamos es reorganizarnos, en el sentido de tratar afiliar a las personas que desafortunadamente por la pandemia algunos cerraron y algunos otros suspendieron o pausaron sus restaurantes y ahorita ya con esta situación en semáforo verde  comienzan a reabrir y entonces, nos vamos a dar a la tarea primero que nada a tratar de regresar a estos afiliados que se separaron de la cámara; como segundo punto, en el mediano plazo, comenzar con cursos de capacitación que por cierto ya dimos el primero en días pasados, a través del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Asociación de Profesionales en Recursos Humanos sobre cómo evitar accidentes laborales. Esa va a ser una de las principales aristas que vamos a tener las capacitaciones con todos nuestros agremiados, vamos a agarrarnos de la mano para poder llegar al éxito y tratar de regularizarlos en el sentido de que estén al día, con todas las normas, vienen nuevas cosas del Seguro Social en las que hay que actualizarse y muchas otras cosas en donde tenemos que actualizarnos para poder estar al día y en el orden jurídico que deben de estar. La meta a alcanzar a fin de año es, obviamente, encontrar la estabilidad y el crecimiento de la Cámara, tanto en el ámbito de agremiados como en el ámbito de capacitación y adiestramiento hacia todos los que forman parte de este gremio.        

—¿Cuál es el padrón actual que tiene la cámara?

El padrón actual es de 142 y nuestra meta es dejarla con 100 afiliados más, es decir, 242.

—Luego de más de un año de incertidumbre a causa de la pandemia, ¿cuál es el panorama actual de la Canirac en Cancún?

—Nosotros vemos en la industria gastronómica que este año será un año de estabilidad hasta diciembre, vamos a estar con altas y bajas. Tuvimos una buena Semana Santa y ahora para el Día de las Madres existe muy buena expectativa para el sector.