AGENCIAS

LIMA.- El gobierno del presidente peruano, Pedro Castillo, nombró a su séptimo ministro del Interior en menos de un año. El funcionario anterior, Mariano González, ocupó el cargo apenas dos semanas, y Castillo no ha dado a conocer las razones por las que lo destituyó.

González había llegado al cargo en reemplazo de Dimitri Senmache, quien a principios de julio fue censurado por el Congreso. El legislativo atribuyó a Senmache la responsabilidad por la fuga de Juan Silva, un exministro cercano a Castillo que era investigado por presunta corrupción.

La fiscalía abrió una investigación preliminar contra Silva por su presunta participación en una organización criminal encabezada por el mandatario para obtener dinero de obras públicas.

Perú vive su más reciente capítulo de una crisis política que se agudizó en 2016, la cual ha dejado cinco presidentes y tres parlamentos. Las disputas en las altas esferas del gobierno continúan luego que el Congreso ha intentado destituir a Castillo en dos ocasiones.

Castillo suma su cuarto gabinete ministerial y ha nombrado en repetidos casos a funcionarios inexpertos en medio de la inflación a nivel global, la pandemia del covid-19 y un derrame petrolero sobre el Pacífico que provocó el peor desastre ecológico en la historia reciente del país.

Tanto Castillo como el Congreso son impopulares en todas las encuestas. Según el sondeo nacional de junio de la firma Ipsos, el presidente tiene una desaprobación del 70%, mientras que la del Parlamento llega a 75 por ciento.