AGENCIAS MÉXICO.- De nueve promesas ambientales que hizo Andrés Manuel López Obrador de 2010 a 2018 en lugares en conflicto por empresas o megaproyectos, sólo ha cumplido una, tiene tres en proceso y cinco no han comenzado.

Los sectores con los que se comprometió en sus tres campañas presidenciales, e incluso como mandatario electo, son el eólico, termoeléctrico, minero e hidroeléctrico, muestra un rastreo realizado por el diario El Universal.

La termoeléctrica de Huexca, en Morelos, y las presas de El Zapotillo y La Parota, ubicadas en Jalisco y Guerrero, respectivamente, están entre los proyectos que el ahora presidente López Obrador prometió cancelar y a los que después dio luz verde.

También incumplió que los sueldos de mineros mexicanos se equiparen con los de sus pares canadienses y que ejidatarios se beneficien de los aerogeneradores que hay en sus tierras.

En contraste, la única promesa que concretó es el apoyo a nueve municipios de Guerrero donde hay explotación minera y la inversión para pavimentar caminos rurales.

Salvador Mora, maestro en el Posgrado de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, señala que “el contexto electoral siempre es clave para establecer una agenda que no va dirigida a materializarse en acciones concretas de gobierno, sino que está basada en una necesidad de triunfo en una competición por el todo o nada”, concluye.