Baja su previsión para 2022, de 3.3% a 2.3%; inversión ha permanecido “plana” desde 2015 y bastante baja desde 2019

MÉXICO.- México acumuló más de cinco años con una inversión estancada y en los tres recientes ésta se tornó bastante baja, afirmó Mathias Cormann, secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Durante la presentación virtual del Estudio económico de la OCDE: México, el secretario general de ese organismo recordó que la economía mexicana se ha debilitado desde la segunda mitad de 2021, por lo que su tasa de crecimiento para este 2022 será de 2.3%, lejos de 3.3% que pronosticó el organismo en diciembre pasado.

Lo anterior debido a la baja que registra la inversión privada, el impacto del incremento de precios al consumidor, la exclusión financiera y la baja productividad en el país. Mientras que para el próximo año la economía mexicana crecería 2.6%, ligeramente superior al estimado previo de 2.5% para 2023, de acuerdo con las previsiones de la OCDE. Cormann consideró necesario dar a los inversionistas nacionales y extranjeros certidumbre sobre contratos existentes y generar estabilidad regulatoria, lo que ayudaría a reiniciar e impulsar la inversión productiva en México.

El secretario general de la OCDE recalcó que México tiene el potencial de convertirse en una economía de alto crecimiento, pero requiere algunas reformas que le den impulso entre ellas la inclusión financiera, incrementar el control sobre la corrupción, reducir los obstáculos al comercio y a la inversión, así como elevar la participación femenina en el mercado laboral. (La Jornada)