AGENCIAS

VIENA.- Investigadores de la Universidad de Utrecht y TU Wien han creado unas ondas de luz especiales que pueden penetrar objetos opacos como si no estuvieran allí.

Cuando miramos un objeto, lo que percibimos es la interacción de la luz con el objeto que estamos mirando. Si la luz no tropezara con los objetos, sencillamente no podríamos verlos.

Los científicos austriacos consiguieron que la luz atraviese los objetos en vez de rebotar hacia nuestros ojos: eso los vuelve invisibles, tanto para nosotros como para cualquier cámara.

Utilizaron una capa de polvo de óxido de zinc opaco (nanopartículas dispuestas al azar), y calcularon exactamente cómo se dispersa la luz a través de ese polvo y cómo se habría dispersado si el polvo no estuviera en el ambiente.

Así, descubrieron que un determinado tipo de onda de luz fue registrada por un detector en el otro lado del polvo exactamente con el mismo patrón, aunque un poco más débil que cuando la enviaron.

“Como pudimos mostrar, existe una clase muy especial de ondas de luz: los llamados modos de luz invariantes de dispersión, que producen exactamente el mismo patrón de onda en el detector, independientemente de si la onda de luz sólo se envió a través del aire o si tenía que penetrar la complicada capa de óxido de zinc”, detalla el profesor Stefan Rotter.

El hallazgo podría ser interesantes para experimentos biológicos, por ejemplo, en los que se desee introducir luz en puntos muy específicos para observar el interior de las células.