La empresa Grupo Karim’s, con sede en Honduras, dedicada a la fabricación de ropa, lo niega pero no aclara la procedencia de las dosis decomisadas la semana pasada

AGENCIAS

CAMPECHE.- Las dosis decomisadas en un aeropuerto de Campeche y su presunta aplicación a más de mil personas; la desaparición de los tripulantes y pasajeros de la aeronave privada que las ocultaba en hieleras y la declaración de la empresa en Honduras, que afirma que las Sputnik V no son falsas –pero no aclara de dónde salieron– ha abierto nuevas interrogantes en este caso.

Las vacunas decomisadas son apócrifas, confirmaron José Luis Alomía Zegarra, director de Epidemiología de la Secretaría de Salud, y la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris). El lote asegurado en México, explicó Alomía Zegarra, no fue comprado por el Gobierno mexicano, y tampoco se tiene conocimiento de que haya sido adquirido por alguna empresa privada.

En tanto, la Cofepris afirmó que cualquier vacuna que no forme parte de la campaña nacional de vacunación se debe considerar como una vacuna falsa o como una vacuna que ingresó ilegalmente al país y que nadie puede garantizar la seguridad de esa vacuna.

Previamente, el Fondo de Inversión Directa de Rusia y el Ministerio de Salud de ese país, responsables del desarrollo de la vacuna Sputnik V, también aseguraron que esas dosis no salieron de sus laboratorios.

La empresa hondureña Grupo Karim’s, dedicada a la fabricación de ropa, negó que las dosis estuvieran destinadas para la venta en la nación centroamericana e indicó que las vacunas serían aplicadas de manera gratuita a sus colaboradores y familiares.

La organización no ofreció detalles sobre la cantidad de vacunas que compró, cómo las adquirió, ni su autenticidad.

El periódico Reforma señaló que miembros de la empresa, taxistas y comerciantes de Mérida recibieron la vacuna falsa el pasado 15 de marzo en las instalaciones del hotel Ocean View y en  un consultorio privado que se ubica en la colonia Prado en Campeche.