El cambio de sede de Argentina a Brasil ha provocado una revolución; motín entre los jugadores cariocas

 

MÉXICO.- Los jugadores de la selección brasilera de fútbol se rebelan frente a la Conmebol. Preocupados por la situación de la pandemia y ante el inminente inicio de la Copa América que, en principio, se jugará en su país a partir del día 13 de junio, la plantilla de la Canarinha se negó a comparecer en la previa del duelo de las eliminatorias sudamericanas entre Brasil y Ecuador, el pasado viernes.

La polémica es tanta que nadie se atreve a afirmar hoy en día que la Copa vaya a iniciar el domingo 13 de junio.

Conmebol confirmó fechas (13 de junio-10 de julio), y cuatro sedes (Brasilia, Río, Cuiabá y Goiania). Pero la contestación social y política dentro de Brasil está siendo tan grande que la situación parece insostenible. Con una pandemia aún grave en el país y más de 460,000 muertos por el Covid, la situación ha estallado en el seno de la Selección brasileña.

El miércoles hubo una reunión entre el presidente de la CBF, Rogério Caboclo, y los jugadores, en la cual estos expusieron su idea de no jugar la Copa en solidaridad con la situación que vive el país y en desacuerdo con el deseo de Jair Bolsonaro, polémico presidente de la nación, de traerse la Copa a Brasil.

Los jugadores no entienden por qué si no se podía jugar ni en Colombia ni en Argentina, la Copa va a Brasil sin ni siquiera haberle consultado a los jugadores antes. Aunque de ahí a que ya se dé por confirmada la suspensión de la Copa va un mundo. Hay que tener en cuenta que muchos de los jugadores de la ‘Seleçao’ apoyaron públicamente, en el pasado, a Bolsonaro, entre ellos Neymar. En tanto, prevalece la incertidumbre. (Marca)