Un juez aprobó el jueves la solicitud para cambiar nuevamente el equipo defensor de Harvey Weinstein, ya que un abogado se retiró debido a la respuesta negativa del público y otro dice que él y su cliente simplemente no lograron entenderse. Faltan apenas 60 días para que el desacreditado magnate del cine vaya a juicio en Nueva York, acusado de abuso sexual.

El abogado Jose Baez, conocido por representar a clientes prominentes como Casey Anthony, pidió permiso para abandonar el caso de abuso sexual de Weinstein. El juez le preguntó a Weinstein si estaba de acuerdo, éste respondió “sí” y la corte dio luz verde.

Weinstein, quien ignoró las preguntas de los periodistas afuera de la corte en Manhattan, agregó a su equipo dos nuevos abogados, Donna Rotunno y Damon Cheronis, ambos de Chicago. Los abogados le prometieron al juez que no buscarán aplazar el inicio del juicio previsto para el 9 de septiembre.

Rotunno ha patrocinado una idea de que el movimiento #MeToo, desatado por revelaciones sobre la presunta conducta de Weinstein, es exagerado y que las mujeres son “responsables de las decisiones que toman”.

“Elijo representar a Harvey Weinstein porque pienso que estos son los tipos de casos por lo que viven abogados que hacen lo que yo hago”, dijo Rotunno afuera de la corte tras la audiencia del jueves. “Nos da la oportunidad de tener un foro para decir lo que creemos, y creo que los hechos y la evidencia en este caso son de hecho favorables para el señor Weinstein”.

Gloria Allred, quien representa a una de las acusadoras en el caso penal, ofreció una perspectiva diferente. “Estoy de acuerdo con que las mujeres son responsables de sus propias decisiones pero, ¿cuándo será responsabilizado el señor Weinstein por las suyas?”, preguntó.

Los nuevos abogados de Weinstein se unen a Arthur Aidala, un abogado de Nueva York cuyos clientes incluyen al rapero 50 Cent, el exprofesor de derecho de Harvard Alan Dershowitz y el difunto jefe de Fox News Roger Ailes.

Baez es el más reciente desertor de lo que una vez fue visto como una versión moderna del “dream team” de abogados de O.J. Simpson.

La audiencia previa al juicio fue pública, pero dos conversaciones entre el juez y los abogados transcurrieron a puerta cerrada.

Tras aprobar la solicitud de Baez de retirarse del caso, el juez James Burke lo llamó al estrado para una conversación privada que duró unos cinco minutos. No hubo un reportero de tribunales que transcribiera la conversación.

Más tarde, el juez llamó a todos los abogados al estrado para una discusión de 10 minutos sobre cómo procederán cuando llegue el momento de seleccionar al jurado.

Aidala pareció perturbado por lo que llamó la “extensa conversación privada” del juez con Baez. Preguntó si él también podía acercarse al estrado, pero Burke le señaló que no.

Cuando le preguntaron afuera de la corte si estaba retirado del caso, Baez respondió, “Sí. Siento que me gané la lotería. Es una broma”.

Baez le dijo a Burke en una carta el mes pasado que Weinstein había dañado su relación al comunicarse con él sólo a través de otros abogados y no cumplir con su acuerdo de honorarios.

El cambio se produjo luego que otro abogado de Weinstein, el profesor de Harvard Ronald Sullivan, dejó al equipo en mayo tras ser criticado por algunos estudiantes y docentes de la prestigiosa universidad en Cambridge, Massachusetts, por su participación.

Weinstein, de 67 años, está acusado de violar a una mujer en 2013 y de realizarle a otra mujer un acto sexual por la fuerza en 2006. Él rechaza las acusaciones.

Baez y Sullivan comenzaron a representar a Weinstein en enero, cuando el exproductor revisó a su equipo legal por primera vez. Eso ocurrió luego que su abogado original, Benjamin Brafman, perdiera una ardua batalla para obtener la desestimación del caso.

Pamela Robillard Mackey, quien representó a Kobe Bryant en su caso de abuso sexual en Colorado en 2003, y el exfiscal de Manhattan Duncan Levin también fueron contratados en enero y posteriormente renunciaron.