OTTAWA.- Pocas horas después de que el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, invocase la Ley de Emergencias para poner final al caos de las protestas, los manifestantes que ocupan desde el 29 de enero el centro de Ottawa respondieron con una desafiante fiesta ante el Parlamento. En la noche del lunes, a -16 ºC, los camioneros que bloquean el acceso al Parlamento canadiense y han situado sus vehículos justo debajo de la oficina del primer ministro, montaron una particular discoteca en respuesta a Trudeau. “No nos vamos”, aseguraban los manifestantes con aplomo, arropados en banderas canadienses.