La iniciativa se llevará a cabo en Nueva Zelanda y Grecia, tras probarla en Estados Unidos, y se basa en utilizar los teléfonos para detectarlos y enviar advertencias

AGENCIAS

MOUNTAIN VIEW.- El gigante de internet, Google, dentro de sus líneas para expandir su negocio más allá de su sector principal, posee una iniciativa para anticiparse a los terremotos e informar a los ciudadanos antes de que tengan lugar. Ya ha hecho pruebas en Estados Unidos, pero ahora ha anunciado que se comenzará a utilizar en Nueva Zelanda y Grecia, con la posibilidad de extenderlo a otros países.

La idea es crear una red conectada a través de los teléfonos, ya que estos, los más modernos, tienen unos acelerómetros que monitorean el movimiento, como cuando el usuario gira o levanta el móvil. Estos sensores son programables como sismómetros rudimentarios, detectando el temblor que causan los terremotos.

Cuando el teléfono detecta por sí mismo el terremoto envía el mensaje con la ubicación aproximada al servidor central. Mientras que un sistema tradicional necesita cuatro estaciones sísmicas para detectarlo, Google crearía la alarma con más de 100 teléfonos. Llegarían alarmas fuertes en pantalla completa a los teléfonos que se encuentren en las regiones donde las sacudidas serían más fuertes.

Otro punto a favor es que estos sistemas de alerta se aprovechan de que la velocidad de la luz viaja más rápido a través de los cables de fibra óptica de internet que las ondas de un terremoto. Entonces, los sismómetros tradicionales detectan el tamaño y magnitud del terremoto, y transmiten una advertencia a través de los teléfonos a los residentes, pudiendo llegar segundos antes de que ocurran. Tiempo suficiente para que la persona pueda ponerse a salvo bajo una mesa o se pueda tirar al suelo.