Los 15 países que lo integran –entre ellos China– concentran 30% del PIB global; nuevo gobierno de EEUU deberá buscar acuerdos y no división, como hasta ahora

AGENCIAS

 

HANOI.– Con China y sin Estados Unidos, la firma de la Asociación Económica Integral Regional (RCEP) en una cumbre regional en Hanoi es otro duro golpe a la Agrupación Transoceánica (TPP), de la cual Donald Trump, retiró a su país en 2017.

Al bloque lo conforman además Filipinas, Malasia, Indonesia, Singapur, Tailandia, Brunei, Vietnam, Laos, Birmania, Camboya, Japón, Corea del Sur, Australia, India y Nueva Zelanda.

En detrimento de los intereses de Washington, el RCEP podría cimentar la posición de China como socio económico con el sudeste asiático, Japón y Corea, y daría a la hasta ahora segunda economía más grande del mundo un mayor margen de maniobra para moldear el comercio en la región.

La RCEP es un acuerdo comercial megarregional sin precedentes que comprende una mezcla diversa de economías desarrolladas, en desarrollo y menos desarrolladas de la región.

Se trata de un acuerdo que cubriría un mercado de 2,200 millones de personas, o casi 30% de la población mundial, con un PIB combinado de 26.2 billones de dólares estadounidenses o alrededor de 30% del PIB mundial, y representa casi 28% del comercio mundial (con cifras de 2019).

“Creemos que la RCEP, siendo el acuerdo de libre comercio más grande del mundo, representa un importante paso hacia un marco ideal de reglas de comercio e inversión globales”, indicó un comunicado.

A pesar de estar fuera del RCEP, es poco probable que el presidente electo y antiguo vicepresidente de Obama, Joe Biden, se reincorpore al TPP en el corto plazo, según indican analistas citados por la agencia de noticias Reuters, ya que su gobierno deberá hacer frente al brote de COVID-19.