Los teléfonos inteligentes plegables comercializados por la familia del famoso narcotraficante son en realidad unos Galaxy Fold con calcomanías sobrepuestas

AGENCIAS

MADRID.- En diciembre del año pasado un nuevo y sorprendente competidor ingresó al mercado de los teléfonos inteligentes de gama alta, en el exclusivo nicho de los smartphones plegables:

Se trataba de Roberto Escobar –hermano del difunto narcotraficante colombiano Pablo Escobar–, quien anunció con bombo y platillo su dispositivo llamado Escobar Fold, con una pantalla que se podía extender y transformarse en una tablet.

Según su página web, el aparato incorpora Android 9.0, un chip Qualcomm Snapdragon 8 con 8 núcleos a 2.8 Ghz, una pantalla Amoled Full HD de 7.8 pulgadas una vez desplegada, y doble cámara de 16 y 20 megapíxeles. El diseño destaca por sus tonos dorados. Pero lo más sorprendente de todo es su precio de venta: sólo 349 dólares.

Demasiado bueno para ser verdad: el youtuber tecnológico Marques Brownlee exhibió el truco en un video que subió a la red. En realidad el Escobar Fold 2 no es más que un Galaxy Fold con una calcomanía dorada, que al ser retirada muestra la marca de Samsung.

Pero si es una estafa, ¿por qué sólo cuesta 350 dólares cuando el smartphone plegable de la coreana vale más de 2,000? Brownlee supone que Escobar únicamente envía los teléfonos a ciertas personas influyentes que se lo piden o celebridades que lo ayudan a promocionar su producto. Sin embargo, al resto de compradores, los consumidores normales y corrientes que hacen sus pedidos a la página web de la empresa en realidad nunca les envía sus smartphones y se queda con su dinero.