Las esposas de los gemelos Flores, condenados por el tráfico de narcóticos, son acusadas de lavado de dinero

 

AGENCIAS

 

CHICAGO.- Las esposas de los gemelos Pedro y Margarito Flores, operadores del Cártel de Sinaloa condenados en Chicago por tráfico de narcóticos, fueron detenidas y acusadas ambas de lavado de dinero, de acuerdo a lo dado a conocer por la fiscalía general del Distrito Norte de Illinois, Estados Unidos.

Los hermanos Flores también fungieron como testigos clave en el juicio contra uno de los líderes del referido cártel mexicano, Joaquín “El Chapo” Guzmán.

Se presume que tanto Viviana López, de 40 años, conocida también como Mía Flores; y Valerie Gaytan, de 45 años, identificada también como Olivia Flores, habían sido cómplices ocultando y gastando cientos de miles de dólares de los montos que sus esposos obtenían mediante el tráfico de drogas.

La acusación expone que el delito se llevó a cabo a través del uso de cambios de moneda, giros postales, tarjetas de crédito, entregas por correo de Estados Unidos, tarjetas de regalos, entre otros medios.

En la conspiración de lavado de dinero también fueron imputados Laura López, de 58 años; Armando Flores, de 52 años; y Bianca Finnigan, de 32 años.

Los señalados se dedicaron a lavar las ganancias monetarias que obtenían los gemelos mediante los ilícitos, según el documento que presentó la fiscalía.

Los hermanos Flores, narcotraficantes del oeste de Chicago, se decantaron por colaborar con las autoridades estadounidenses en un juicio contra el Cártel del Sinaloa en dicha ciudad, el cual comenzó en 2008.

Obteniendo una sentencia menor, los mellizos aceptaron grabar conversaciones con el capo sinaloense en las áreas montañosas del estado mexicano, para posteriormente uno de ellos fungir como testigo en el juicio que Guzmán Loera tuvo en Nueva York a finales de 2018.