AGENCIAS

HAWAI.- Cuando Lavinia Mounga decidió embarcarse en un vuelo desde Salt Lake City (Utah) hasta Honolulu (Hawai), nunca pensó que existiera la más remota posibilidad de que pudiera estar embarazada. Sin embargo, cuando el avión ya había iniciado su viaje, esta mujer que iba junto a su pareja y el resto de su familia empezó a tener contracciones.

Poco después ya estaba en trabajo de parto, para sorpresa de todos los presentes y por sobre todo de ella misma.

Afortunadamente, contó en el avión en medio del océano con la presencia de tres enfermeras, un asistente médico y un doctor de medicina familiar, quienes luego de tres horas, y antes del aterrizaje en Honolulu, ayudaron a que el parto fuera exitoso.

Fue así como nació un bebé de alrededor de 26 semanas de embarazo, al que sus padres llamaron Raymond Kaimana Wade Kobe Lavaki Mounga, quien llegó al mundo en buen estado de salud, pero prematuro, por lo que apenas aterrizaron en la isla, fue llevado al hospital, donde tanto él como su madre fueron internados.

Actualmente ambos se encuentran bien. Lavinia ya está fuera del hospital y el pequeño sigue internado a la espera de que sus órganos maduren lo suficiente para que pueda sobrevivir por su cuenta.