Una de las comisiones de cabildo más importantes fue entregada a la coahuilense Alma Elena Reynoso Zambrano, sin arraigo y desconocedora de las problemáticas que enfrenta Cancún

Salvo el caso de las comisiones de Gobierno, Régimen Interior y Anticorrupción que por ley le toca encabezar a la presidenta municipal, así como la de Hacienda, Patrimonio y Cuenta que competen al síndico, el resto fueron repartidas dando preferencia a los regidores integrantes de la planilla ganadora que asumieron las de mayor importancia, mientras que las otras se asignaron a los concejales que llegaron al cargo por la vía de representación proporcional, sin importar que quienes las presiden tengan o no el conocimiento ni la experiencia necesarios para encabezarlas.

La asignación se hizo desde la primera semana de la presente gestión y los nombramientos han generado incertidumbre y cuestionamientos por el perfil de cada uno de los regidores que la presiden; un caso significativo es el de uno de los concejales que se mantiene en el cabildo desde la administración anterior, Pablo Gutiérrez Fernández, donde presidía la encomienda de Desarrollo Urbano y Transporte, pero en la actual ostenta la de Educación, Cultura y Deporte, lo que refleja que no hay continuidad real a los proyectos.

Pero sin duda, el caso que más llama la atención es la entrega de la comisión de Seguridad Pública y Tránsito, que regularmente se le asigna al primer regidor por la cercanía al presidente municipal en turno, pero en esta ocasión se otorgó a la decimotercera concejal, Alma Elena Reynoso Zambrano, del partido Fuerza Por México, oriunda de Torreón, donde fue animadora del equipo de béisbol Vaqueros Laguna y hace unos años protagonizó una polémica al asumir la primera regiduría en el cabildo de esa ciudad, sin ningún antecedente en el quehacer político.

Lo preocupante es que hoy Reynoso Zambrano tiene bajo su responsabilidad una comisión esencial para Cancún, que requiere de alguien que realmente esté involucrado en la problemática que enfrenta la ciudad en materia de seguridad, para que con ello se cumpla uno de los objetivos manifiestos del cabildo, que es “coadyuvar en el ejercicio de un buen gobierno municipal para satisfacer las necesidades de la sociedad”.

El Despertador de Quintana Roo ha buscado repetidamente a la regidora para una entrevista, pero en ninguna ocasión fue localizada en su cubículo del palacio municipal; esta vez nuevamente su asistente tomó nota de la petición sin que hasta el momento se tenga respuesta alguna para platicar con la concejal, de quien se argumenta que está “en recorridos, conociendo la ciudad”. (Por Salvador Canto, fragmento del reportaje Cabildo de neófitos, publicado en la edición semanal #943 de El Despertador de Quintana Roo)