Comunidades indígenas y ambientalistas insisten en los potenciales daños ambientales y sociales que generaría el Tren Maya; ejercicio promovido por el gobierno federal “es una burla”

REDACCIÓN, CANCÚN.- Siete grupos indígenas y ambientalistas de Campeche, Quintana Roo y Yucatán emitieron un comunicado en el que calificaron la consulta promovida por el gobierno federal en torno al Tren Maya, prevista para el 15 de diciembre, como “una burla” con “claras vulneraciones” a las diversas autonomías locales.

Entre las organizaciones que firmaron el documento se encuentran el Frente Peninsular por la Selva (FPVS), Culture Box Project (CBP), Ka Kuxtal Much’ Meyaj A.C., Kanaantaal Sijnal A.C., Frente Campesino en Defensa de la Tierra y la Vida, A.C., Red de Productores de Servicios Ambientales A.C., y la Escuela de Agricultura Ecológica Yits Ka´an A.C.

Las agrupaciones expresaron su preocupación acerca de los potenciales “daños ambientales y sociales” que la obra dejaría en la región y manifestaron gran suspicacia sobre la pretensión de llevar a cabo un ejercicio participativoen el que no se especifica la metodología con la que se emitirá el voto ni los métodos con los que se contabilizará.

En el mismo sentido se expresó la Asamblea de Defensores del Territorio Maya ‘Múuch’ Xíinbal’, conformada por cerca de 2 mil ejidatarios, campesinos y apicultores de la península, quienes consideraron que “la Región Biocultural será deforestada y contaminada”, al poder potenciar sin control nuevos centros urbanos dentro de áreas naturales.

Adicionalmente, la dirección de Etnología y Antropología Social del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y el departamento de Producción Económica de la Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco (UAM) alertaron sobre los daños a “las actividades productivas tradicionales”.

Según el estudio “Impactos Sociales y Territoriales del Tren Maya”, el patrón de asentamientos típicos de la población indígena y campesina “se transformará a raíz de la construcción de quince centros de población”.

A pesar de que la “obra utilizará los derechos de vía existentes”, los ambientalistas manifestaron su nerviosismo, dado que la obra no cuenta con estudios públicos de impacto ambiental, así como datos tecnológicos que lo describa, lo que, a decir del Centro de Investigación Científica de Yucatán AC, podría generar un “colapso ecológico”, principalmente en Calakmul y Sian Ka’an. (Fuente: El Financiero)