“Me encerraban en una caja de madera desde las 9 de la noche hasta las 7 de la mañana”, recuerda

AGENCIAS

MÉXICO.- Blue Demon Jr., uno de los luchadores más icónicos de México, reveló en una entrevista que tuvo una dolorosa infancia al lado de su madre biológica, algo que cambió con su padre adoptivo, el luchador Blue Demon.

Su madre no lo podía mantener y lo mandó con el luchador, con quien tuvo mucha felicidad hasta que su mamá pidió que regresara con él.

“Estuve seis años en el seno familiar hasta que mi padre cumplió las bodas de plata, y mis hermanos mandaron a hacer la invitación, y me pusieron con el apellido de mi papá y mi mamá adoptivos, cosa que le molestó a mi mamá (biológica), va y habla con mi papá y le dice: ‘no, no estoy de acuerdo, devuélveme a mi hijo’, y mi papá por no causar problemas accedió tristemente, desde los seis años y medio me fui a hacer una vida que yo no le puedo llamar vida con Ileana al estado de Yucatán”, explicó el luchador en entrevista con el Hijo del Santo.

Cuando su madre salía a trabajar, la pareja de su madre lo encerraba en una caja de madera, por lo que el luchador permanecía desde las nueve de la noche a las siete de la mañana.

“En ese entonces, el alcoholismo de Ileana tenía muchas vicisitudes muy difíciles para un menor, primeramente tenía su pareja, no sé, creo que le caía gordo y me golpeaba, había abuso infantil. Tenía una caja de un motor de madera, cuando ella se iba a trabajar, a mí me encerraban en esa caja de madera y la pareja de Ileana clavaba la tapa, los primeros días era muy difícil”, confesó.

Desclavaban la caja para que se vistiera y fuera a la escuela Quintana Roo, en la que su madre le daba un peso para el día, dinero con el que podía comprarse un agua de horchata y tres tacos de cochinita pibil.

El luchador supo ver el lado positivo y mientras estaba en esa caja imaginaba que estaba en una cabina de vuelo.

“Al principio tenía mucha desesperación, porque no era grato, pero con el tiempo, una de mis ilusiones fue volar, y convertí esa caja de castigo en mi cabina de avión, metía mis instrumentos, avión de hoja de palma y juguetitos que yo utilizaba como controles, y pues se me hacía el rato agradable mientras me quedaba dormido”.

Demon Jr. tuvo que ir a terapias para superar esa etapa de su vida. “Saber si eras deseado o no deseado, pero afortunadamente la vida me ha dado la oportunidad de encontrarme con las dos versiones”.