La norma que había sido aprobada la semana pasada penalizaba con hasta 10 años de prisión a las mujeres que abortaran y prohibía el matrimonio igualitario

AGENCIAS

GUATEMALA.- El Congreso de Guatemala, controlado por oficialistas conservadores, archivó una polémica ley que contemplaba el endurecimiento de las penas por aborto y prohibía el matrimonio homosexual, en medio de reclamos de organismos de derechos humanos y a pedido del propio presidente.

“El Pleno del Congreso de la República de Guatemala acepta las observaciones al decreto y se traslada al archivo”, informó el Parlamento.

La norma, aprobada el 8 de marzo por amplia mayoría, penalizaba con hasta 10 años de cárcel a la mujer que abortara y modificaba el Código Civil para prohibir expresamente el matrimonio entre personas del mismo sexo.

También restringía la enseñanza escolar sobre diversidad sexual. La propuesta, ahora archivada, consideraba que “grupos minoritarios” proponían “modelos de conducta y de convivencia distintos al del orden natural del matrimonio y la familia” y amenazaban “el equilibrio moral” de la sociedad.

“La presidenta del Congreso, Shirley Rivera, no dio la palabra para discutir las objeciones” contra la norma, “les da vergüenza reconocer que teníamos razón y que ellos se equivocaron (…) En fin, lo bueno es que el decreto se archivó”, dijo la legisladora Lucrecia Hernández, de la bancada minorista de centroizquierda Semilla.

Sin los cambios propuestos, la ley vigente penaliza el aborto con hasta tres años de prisión. Sólo es permitido y no sancionado cuando está en peligro la vida de la madre. En el caso del matrimonio, contempla que es la unión legal entre “un hombre y una mujer”.