BELICE.- Una batalla de casi 10 años contra una ley colonial anticuada ha llegado finalmente a su fin, después de que el tribunal de apelaciones de Belice confirmara unánimemente la semana pasada un fallo en 2016 según el cual la prohibición de las relaciones sexuales entre homosexuales es incondicional, y que había sido apelado por el gobierno del país y la iglesia católica. El panel de apelación compuesto por tres jueces rechazó la apelación, cementando de manera concluyente las protecciones antidiscriminatorias.