A través del personaje de Penélope Cruz en la película Madres paralelas, el cineasta descubre su relación de niño con las mujeres a su alrededor

LOS ÁNGELES.- Es imposible imaginar la carrera de Pedro Almodóvar sin Penélope Cruz. De la misma forma que es imposible imaginar a la actriz sin la mano del cineasta. Y fue gracias a Pedro que Penélope fue premiada en el pasado Festival de Cine de Venecia por Madres paralelas.

“Penélope Cruz no me bombardea por teléfono para trabajar conmigo. Pero  sé que ella está esperándome en su casa. Es cierto que cuando escribo un personaje que está alrededor de su edad, es la primera actriz a la que se lo propongo y le mando el guion.

“De modo natural, nuestra relación se ha ido alimentando de algo real que es el resultado del trabajo, de la experiencia. Eso es una ventaja a la hora de pensar en ella. Tampoco indica que en el rodaje no ocurran cosas, porque tengo que adaptarme”, platica Almodóvar.

En 2000 la Academia de Hollywood nominó al Oscar como Mejor Película Extranjera a Todo sobre mi madre. El año anterior, el manchego había sido nominado por Mujeres al borde de un ataque de nervios.  

Almodóvar platica sobre lo que significa poder dirigir a Penélope Cruz.

“La admiro muchísimo como actriz, pero es muy importante saber que nos entendemos y que hablamos el mismo lenguaje. Y yo, sabiendo que soy exhaustivo como director, sé que ella me va a entender lo que le pido y, sobre todo, que va a intentar hacerlo todas las veces que sea posible. Hay dos elementos que me hacen siempre confiar en Penélope además de su belleza obvia, evidente y su fotogenia. Ella tiene una fe ciega en mí, tiene la misma fe que yo tengo en mí mismo. Eso te da un enorme valor, además es muy trabajadora. No va a escatimar tiempo para entregarme todo lo que sea necesario que yo le vaya pidiendo para los ensayos de una película”.

Madres paralelas es su nuevo proyecto en conjunto, que ha sido muy bien recibida en festivales y por los críticos.

“En esta película ella es una madre muy particular y al ser el papel más complejo que he escrito para ella, yo necesitaba tener resuelto el problema de la interpretación antes de rodar. Entonces, con ella y con Milena (Smit) que comparte la mayor parte de su personaje con Penélope, hemos ensayamos de una vez todo el guion. Y al rodar, ya sabíamos perfectamente lo que íbamos filmar.”

“Ahora me interesa mostrar más a madres imperfectas y cuestionables que atraviesan períodos muy difíciles de resolver, simplemente porque las madres anteriores eran todo lo contrario. Las madres anteriores estaban inspiradas en mi propia madre, en las figuras femeninas que me educaron cuando niño.

En Madres paralelas, Pedro intenta ilustrar un país de madres solteras, con mujeres que recogen los platos sucios de los hombres, incluyendo las guerras sucias de una dictadura.

La realidad abrió debates paralelos, como cuando mostraron el título Madres paralelas por encima de la foto de un pezón lactante, con un poster que fue borrado de Instagram por las reglas del sitio sobre desnudos.

En el filme, también se muestra en una cinta española sobre los desaparecidos de la dictadura. 

“La memoria histórica es un tema pendiente en nuestro país. La sociedad española tiene una deuda enorme con las familias de los desaparecidos, de esas personas que están enterradas en fosas, en lugares indignos

“Federico García Lorca ha sido siempre una inspiración. Él es nuestro desaparecido más ilustre y más conocido fuera de España.

“La ventaja del cine, que se pueden mostrar situaciones y hechos que por años han estado en silencio. Y los desaparecidos es un tema que políticamente se ha mantenido así”, finalizó.