Se trabaja en mejorar la infraestructura turística de Mani y Sisal, que se sumaron hace unas semanas a otros 130 lugares del país con esa denominación

AGENCIAS

MÉRIDA.- Luego de que el pasado mes de diciembre la Secretaría de Turismo federal (Sectur) nombró al municipio de Maní y al puerto de Sisal como nuevos Pueblos Mágicos, los cuales forman parte de los 132 lugares del país que ostentan esta denominación –otros dos, en Yucatán: Valladolid e Izamal–, ambos están mejorando su infraestructura turística.

El 10 de enero pasado, en un evento en el que participó el alcalde de Maní, Arón Interián Bojórquez, se develó la nueva marca turística del municipio y la placa conmemorativa por el nombramiento de Maní como Pueblo Mágico.

Por medio de un video promocional, se presentaron cuatro grandes características que resaltan sus artesanías, historia, gran cultura y leyendas, elementos que juntos serán los engranajes que forman parte esencial de la entidad y que buscan proyectar los recursos y cualidades a públicos internos y externos.

Maní es un municipio que también es representada por diferentes acciones, como el punto de cruz y el bordado como artesanías, el exconvento de San Miguel de Arcángel, un edificio histórico y emblemático, las casas tradicionales que rodean sus calles, sus meliponarios y restaurantes, que son de vital importancia para la economía de la entidad, y su emblemático cenote Xkabaach’e’n, un lugar que guarda infinidad de historias y leyendas.

En cuanto al puerto de Sisal se han llevado a cabo obras de infraestructura recreativa para el mantenimiento y conservación de la imagen urbana que tienen el objetivo de mejorar la avenida 16 de septiembre.

También se crearon lugares para las nuevas áreas de ventas y performance, y las emblemáticas letras de Sisal se conservarán en su sitio actual, al inicio del muelle como atractivo visual.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Hunucmá, de donde depende la comisaría de Sisal, está dando mantenimiento a postes y registros ya existentes, y se han suministrado nuevos letreros de alto y nomenclatura de calles y circulación, creando orden en la zona que será ahora zona turística.