Advierte exfuncionario de Solidaridad que el presidente López Obrador estaría siendo inducido a autorizar un proyecto que ya había sido previsto por la empresa minera; avanzan acuerdos, dice el presidente; ofrece comprar terrenos

MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que ofreció a la empresa Sac-Tun comprarle las cuatro mil hectáreas del banco de material que explotan en la Riviera Maya, como parte de las negociaciones para cerrar un acuerdo y terminar con el daño ecológico en las inmediaciones de Playa del Carmen.

Días atrás, había informado que en las negociaciones con la empresa estadunidense Vulcan Materials Company, de la que es subsidiaria Sac-Tun, antes conocida como Calica, les ofrecen permitirles habilitar las excavaciones hechas en los bancos pétreos como atractivos turísticos. “Es una de las propuestas que les estamos haciendo. Como ya escarbaron, el agua es turquesa por la piedra, entonces, con un poco de imaginación y de talento se podría utilizar como zona turística, casi albercas naturales, buscando un acuerdo. Pero que ya no se siga destruyendo y que retiren su demanda, porque no tiene fundamento legal”, dijo el martes pasado.

Este jueves, en su conferencia mañanera, explicó que se está avanzando en llegar a un acuerdo con la empresa.

“La otra cuestión que planteamos es que hagamos un avalúo, que Hacienda haga un avalúo de conformidad con nuestra legislación y a ver cuánto cuesta y les compramos las cuatro mil hectáreas y ya nosotros vemos cómo esos terrenos se utilizan para parques públicos y hasta actividades turísticas y tenemos recursos para eso. Lo que le comenté a Esteban (Moctezuma, embajador de México en Estados Unidos) es que hay condiciones para un arreglo, pero que se entienda que ya no es el tiempo de antes”, expresó.

Por ahora, dijo, se llegó a un primer acuerdo para permitir a Sac-Tun que extraiga todo el material que tiene almacenado con la condición de que ya no extraigan más de los terrenos que se encuentran en las inmediaciones de una de las zonas turísticas más importantes del país.

“Nos piden que se permita sacar el material que tienen almacenado, dijimos ‘sí, pero ya no van a extraer más, ya no pueden ser bancos de material’. No se pueden utilizar como bancos de material esos predios porque están en plena zona turística, como a un kilómetro de las playas del Caribe, del mar turquesa, ¿cómo?”, criticó.

Sin embargo, insistió en que si Sac-Tun tiene interés, se les darían las facilidades para que realicen en el sitio donde está el banco de material un proyecto turístico.

“Las más de cuatro mil hectáreas en un complejo turístico y que el puerto incluso sea para cruceros y nosotros, de acuerdo con la normatividad, les diríamos qué densidad, cuántos cuartos podrían tener, en qué condiciones el puerto, qué tipo de buques pueden llegar de conformidad con el calado cuidando que no se vayan a afectar corales flora, fauna del caribe”, añadió.

Proyecto de “albercas turísticas” ya estaba previsto

El presidente López Obrador ha sido insistente en la propuesta de construir “albercas turísticas” para aprovechar los socavones generados por la empresa Sac-Tun tras la extracción de caliza durante tres décadas, desde que se denominaba Calica, para exportarla a Estados Unidos; sin embargo, de acuerdo con documentos estatales, la idea de instalar un fraccionamiento turístico ya estaba proyectada desde la década de los ochenta y dos mil.

Es decir, desde el gobierno de Quintana Roo, en manos de algunas de las familias más poderosas de la entidad, los Joaquín y los González, ya se tenía previsto este proyecto, de acuerdo con una investigación del portal Sin Embargo.

El Programa de Ordenamiento Ecológico de Cozumel (octubre 2008, página 111) muestra que la Unidad de Gestión Ambiental (A13) regulada, donde se encuentra la mayoría del polígono de Calizas Industriales del Carmen (Calica), tiene el uso predominante de minería, portuaria e industrial, pero los usos compatibles son turístico y comercial condicionados a la Manifestación de Impacto Ambiental aprobada en el 2000.

“Vi en el expediente [permisos solicitados] quiénes estaban detrás y obviamente eran intocables por parte del municipio por el poder de los Joaquín en Quintana Roo, sobre todo entonces de Don Nassim [padre de Pedro Joaquín Coldwell, fallecido en 2016], a quien había que pedirle permiso para hacer todo –le decían ‘el Tatich’ (jefe)– y dominaba todo desde Cozumel”, dijo una fuente cercana al Municipio de Solidaridad de esa época que pidió el anonimato.

El Programa de Ordenamiento Ecológico de Solidaridad (planeado desde 2005 y publicado en marzo 2009, página 35) coloca a esta UGA-A14 regulada en aprovechamiento sustentable con uso de suelo condicionado a urbano, turístico, ecoturístico, deportivo y parque recreativo. La condición son los términos que establece la Ley de Turismo del Estado de Quintana Roo, entonces gobernado por Félix González Canto.

Años antes de la publicación de los Programas de Ordenamiento de Cozumel y Solidaridad, dijo el exfuncionario público citado por Sin Embargo, ya había observado las vistas arquitectónicas del proyecto de Calica concebido como un desarrollo inmobiliario “con yate a la puerta”.

“El presidente dice que se pueden hacer albercas, pero ya estaba previsto como un proyecto de ese tipo; no es al azar que haya quedado así la distribución y las excavaciones”, aseguró. “Si está siendo asesorado por alguien de la Semarnat de la vieja guardia, lo están induciendo a que él mismo autorice ese proyecto que desde el principio concibió Calica”, alertó.

La zona de la propuesta turística se ubica donde también estarán estaciones del proyecto federal del Tren Maya, que conectará hacia el Corredor del Istmo de Tehuantepec. (Con información de Milenio y Sin Embargo)