MÉXICO.- Las revisiones salariales cayeron a su nivel más bajo en cuatro años debido al impacto de la inflación. En septiembre, el incremento salarial de los trabajadores en la jurisdicción federal fue en promedio de 4.1%, este aumento quedó rebasado por el alza de precios registrada en el noveno mes del año y, como resultado, en términos reales se observó un decremento de -1.82 por ciento.

De acuerdo con datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), el decremento en las negociaciones salariales de septiembre es la peor cifra reportada desde octubre de 2017, cuando los aumentos de sueldo cayeron -2.4% en términos reales. Paradójicamente, las revisiones contractuales del mes pasado fueron la segunda con mayor número de trabajadores involucrados en lo que va del 2021, abarcando a 233,485 empleados.

La inflación general anual en el mes pasado se ubicó en 6%, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este nivel representó el doble de la meta planteada por el Banco de México (Banxico).

 “La inflación sí está alta”, apunta Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base. “Si vemos la inflación subyacente, que ya lleva 10 meses consecutivos subiendo, se ubicó en su mayor nivel desde agosto de 2017, ahí está la respuesta de que desde el 2017 no se veía un decremento en el salario real tan pronunciado”, explicó.

Con las cifras de septiembre, el saldo de los incrementos salariales acumulado es negativo, con una baja de -0.45% en términos reales. Los especialistas coinciden en que las negociaciones contractuales pueden mantenerse presionadas en lo que resta de 2021. (El Economista)