Difícil panorama: sin liquidez, con deudas y caída de valor de sus acciones; 148 mil 500 plazas están en riesgo

MÉXICO.- Las aerolíneas mexicanas pretender acelerar la reapertura de sus operaciones durante julio, alcanzadas por deuda, poca liquidez y depreciación de su valor público.

La más grande y con mayor tiempo de operación en el país, Aeroméxico, vio una disminución de 65 por ciento en el valor de sus acciones en lo que va del año el viernes pasado, cuando éstas cotizaron en 5.7 pesos, su mínimo histórico. Las de Volaris se han depreciado 40.50 por ciento este 2020.

Interjet, que no es pública, está endeudada con el gobierno mexicano, fue sacada de la Cámara de Compensación de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) y ello complica la comercialización de sus vuelos internacionales.

En este entorno, la industria aérea ha apostado por ajustes salariales hasta de 50% y turnos rotados para mantenerse a flote, pero la IATA estima que en el país unas 148 mil 500 plazas están en riesgo.

De acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social, de marzo a mayo, en el sector comunicaciones y transportes, se han eliminado 40 mil empleos formales, sobre todo en las áreas que menos recursos perciben.

Las aerolíneas aseguran que no ha habido despidos; no obstante, sí han efectuado recortes salariales, los cuales fueron firmados como “contribución” a la empresa y con el objetivo de mantener los puestos de trabajo.

En todos los casos, redujeron sus capacidades de vuelo y destino. Este mes, con semáforo naranja en la Ciudad de México –que refiere, por el momento, una reducción en la tasa de contagios y hospitalización por la pandemia de Covid-19–, las empresas abrirán 20 rutas nacionales y 10 internacionales. (La Jornada)